La Puerta del León es la impresionante puerta de la fortaleza, con torretas, de la extinta fortaleza prusiana del Kaiser Alexander. Los grifos a ambos lados del portal, fundidos en la Sayner Hütte, y la gran inscripción dan una buena impresión del impacto militar y urbanístico de la instalación. Para la defensa de la ciudad contra enemigos procedentes de dirección suroeste, en 1817 se comenzó la construcción de la fortaleza Kaiser Alexander, que fue una de las mayores obras de fortificación en Alemania. La fortaleza tenía un diseño de casi plano cuadrado con aproximadamente 500 metros de longitud de lado en una superficie de 25 ha.

Al sistema Alexander pertenecían, además de la fortaleza conservada de Gran Duque Constantín y la batería en Hüberling, las desaparecidas obras del fuerte Gran Duque Alexander, la batería Mosel, la trinchera de Moselweißer y la comunicación subterránea con la fortaleza Constantín. Durante la guerra franco-alemana de 1870/71, la fortaleza albergaba un campo de prisioneros de guerra de hasta 10,000 hombres. A pesar de los grandes gastos, tuvo que abandonarse en 1903, obsoleta y dañada por aguas subterráneas. Después de la Primera Guerra Mundial, la instalación fue casi completamente demolida entre 1920 y 1922, quedando solo la Puerta del León y el reducto. La batería Hüberling ya había sido entregada a la ciudad de Coblenza antes de 1903 y hoy es un monumento.

Se discutieron varias reutilizaciones de la fortaleza, pero ninguno de estos planes se llevó a cabo. Después de 1945, se establecieron barrios de miseria en el reducto, los cuales, al igual que en muchas otras obras de fortificación, fueron destruidos por explosiones en 1964. Aún hoy, los caminos en la Karthause están determinados por los antiguos muros, y la Puerta del León saluda a cada visitante en el camino hacia arriba.