¡Ecológico - delicioso - fresco!

Dos razones nos han llevado a hornear panes y bollos de origen controlado y biológico. Por un lado, la creciente amenaza a la sostenibilidad de nuestro planeta. La agricultura biológica controlada significa proteger los hábitats cada vez más amenazados de la fauna y la flora, así como nuestro agua subterránea cada vez más en riesgo. El grano biológico de nuestra región es de excelente calidad y contribuye, sin largos y confusos caminos de transporte, a una buena huella ecológica. Por otro lado, queremos hornear un buen pan: con los mejores ingredientes y de la más alta calidad. Estos productos agrícolas de alta calidad son procesados en nuestra panadería mediante un trabajo manual tradicional y laborioso en los "alimentos" pan y bollos. Sin química y con mucho tiempo, llevamos – al igual que hace cien años – una masa madre tradicional. En muchas horas de fermentación desarrolla ácido acético, bacterias lácticas y levaduras. Esto hace que nuestro pan tenga un aroma incomparable y sea muy digestible. A través de una cocción larga y suave en horno de piedra se obtiene la fina miga y la crujiente corteza. Hoy todos sabemos que una alimentación adecuada contribuye al bienestar y previene la aparición de muchas enfermedades.
La producción y el consumo de productos integrales y biológicos no es una moda, sino una necesidad – ¡para nosotros y nuestro entorno!